Pizza

He ido probando distintas recetas de masa para pizza, pero ninguna había llegado a convecerme. Esta vez me animo a compartirla con vosotros porque creo que ésta si que merece la pena. El resultado, una masa suave, fina y crujiente, como nos gusta en casa. 

Ingredientes:

- 450g de harina panadera

- 320g de agua muy fría

- 4g de levadura fresca

- Una pizca de sal

- 1 cucharada de AOVE

Paso a paso:

1. Poner la harina dentro del bol y añadir el resto de los ingredientes excepto el aceite. Mezclar lo justo para que se integren y dejar reposar la masa 10 minutos cubierta con trapo. 

2. Pasados los 10 minuitos volver a amasar hasta que se desarrolle el gluten, la masa debe quedar lisa, elástica y brillante. Cuando veamos que está en este punto podemos añadir la cucharada de aceite. Volvemos a amasar muy bien hasta que quede completamente integrado a la masa. 

3. Ponemos la masa en un recipiente hermético, que previamente habremos aceitado y la dejamos reposar un mínimo de 12 horas en la nevera, puede aguantar unas 48 horas sin problemas. 

4. Cuando queramos usar la masa lo único que tenemos que hacer es sacarla de la nevera y dividir la masa en 3 porciones de 250g aproximadamente. Bolear los tres porciones y dejarlas atemperar 30 o 45 minutos a temperatura ambiente, cubiertas con un poquito de harina y un paño por encima.

5. Estiramos la masa dándole la forma que nos guste, el centro de la masa debe quedar bien fino y los bordes un poquito mas gruesos. Si vemos que la masa se retrae es porque debe reposar un poquito mas. Precalentamos el horno a 250ºC por abajo y con ventilador.

6. Extendemos el tomate por toda la base, es muy importante que sea tomate casero, no tiene nada que ver. Hacer salsa de tomate es bien simple, se trituran los tomates y se fríen con un poquito de sal y aceite hasta que reduzca lo suficiente y quede bien sólida. Ponemos un poquito de orégano por encima y cubrimos con queso parmesano. Ésta es la pizza margarita básica, a partir de aquí podéis complementarla con los ingredientes que mas os gusten. 

7. Horneamos 10-12 minutos a 250ºC, vigilando que no se nos queme, comer. Cuando llegue 5 minutos podéis añadirle un chorrito de aceite, yo le he añadido uno picante para que le de un toque. 

                            

      

8. La sacamos, la cortamos y ya la podemos servir, calentita y recién hecha. 

Una pizza muy sencilla que queda riquísima, es la pizza de calabacín, seguimos los pasos anteriores pero incorporamos por encima un calabacín laminado muy fino. Picamos un diente de ajo muy muy chiquitito, junto con pimentón dulce o picante y un chorro de aceite. Ponemos este majado por encima del calabacín, y cubrimos con queso parmesano, el resultado es espectacular. 

También la típica y no por eso menos rica, versión de atún con huevo, muy buena también.